Sé por teoría que estas cosas suceden. Internet es un pirateo continuo. Pero comprobarlas con los propios ojos no deja de sorprender.
Resulta que voy a abrir la página de yahoo para acceder a mi correo electrónico. Pongo en la barra de direcciones la URL: yahoo.es. Le doy a intro y, ¿qué me sale? En lugar de la web de yahoo me sale una búsqueda de Google de la palabra que tenía como contraseña hace unos dos años. Una palabra que yo no había tecleado para nada, porque ya no la uso como contraseña.
Cosas veredes, amigo Sancho...